jueves, 24 de noviembre de 2016

El bosque de Banastón... ¡con parrilla! (20 Nov) Por Marcos






Apurando el otoño y apurando las horas previas al anunciado aguacero que se nos venía encima, Jorge y yo elegimos una ruta de la ZonaZero circular y de medio día.

Salimos desde Boltaña con la intención de enlazar en Aínsa con la número 13, la del bosque de Banastón en las faldas del macizo de la Peña Montañesa. Se trata de una ruta forestal y de nivel técnico medio, que no es poco para lo que se gasta por aquí. Además creemos que vamos a marcar un hito en la historia de la ZonaZero, ya que Jorge está empeñado en hacerse la ruta con su bici rígida de toda la vida que entre otras grandezas... ¡tiene hasta parrilla!. 
Desde luego, en este mundo del Enduro en el que es difícil ver una bici de menos de 3000 pavos, es de agradecer este toque clásico (o vintage que dicen ahora...), ¡bravo Jorge!.

Pues eso, con más miedo a que se desmonte la bici de mi compañero que a la meteorología o a las trialeras salimos por la escollera del Ara hasta llegar a Aínsa. A partir de ahí subida por una otoñal carretera hasta el pueblo del Soto, donde nos metemos de lleno en el bosque a través de pistas muy cómodas y frondosas. Poco a poco se van cerrando hasta desviarnos por una senda perfectamente acondicionada para el paso de las bicis, con un suelo limpio y sin apenas piedras que hace que disfrutemos de la corta subida y el rápido descenso hasta el cruce de Sarrau Chico, donde seguimos bajando pero ya por pista. El bosque nos rodea en todo momento.
Aunque toda la ruta se podría hacer por pistas, el último tramo de descenso desde Pumariello hasta la carretera que baja de Buchitar se hace de nuevo por sendero, algo más técnico pero igualmente asequible a nuestro nivel. 
La bici de Jorge aguanta... solo se ha soltado un enganche de la parrilla con la vibración, que volvemos a atornillar para seguir la excursión. 
La vuelta a Aínsa la hacemos por el cauce del río que baja de Soto, ciclable a pesar de ir... ¡pedaleando dentro de un río!, y eso que ya había empezado a llover. 

Una vez en Aínsa nos damos el gusto de subir hasta el castillo montados en la bici y tras pasar por la plaza, nos dirigimos a Boltaña por la pista que desde la Cruz Cubierta se dirige a San Vicente de Labuerda. Esta pista es habitualmente una subida mantenida hasta la balsa que marca el desvío hacia Boltaña, antes del Cocullón. Sin embargo, las gotas caídas hasta ese momento habían formado una película de barro arcilloso que se pegaba como la brea a las ruedas y zapatillas, haciéndonos imposible avanzar al bloquear continuamente las ruedas. Esos 4 ó 5 kilómetros, que iban a ser cómodos y rápidos, se convirtieron en un pequeño infierno en el que sólo se podía avanzar empujando la bici, llevándola a hombros o incluso campo a través por el bosque, salvando el lodazal de la pista. Esta última opción nos enseñó que por fin este año han salido los rebollones que, ahora si, eran fáciles de encontrar... ¡y de pisar si no se andaba con cuidado!.
Cuando por fin dejamos la dichosa pista y empezamos por fin a rodar pasó lo que siempre pasa en estas situaciones; una pedalada más fuerte de lo debido y... ¡adiós patilla!. Al final fue verdad que la bici de Jorge no iba a aguantar.
Con la patilla rota tocó bajar como se pudo hasta Boltaña por la última senda del día, más difícil técnicamente que el resto y más en mojado, pero sin grandes sustos. 

A pesar del barro el bucle es realmente espectacular, de dificultad media y no muy larga. Sin duda para repetirla pronto, con parrilla o sin ella...

 
 
 
 
 

lunes, 14 de noviembre de 2016

RUTA MONEGRINA DE BTT. Por Marcos (12 Nov 2016).






Mañana de sábado, con sol en este otoño eterno y sin viento. Diego y yo, de nuevo.
Esta vez nos vamos a Monegros, una de nuestras zonas preferidas por la infinidad de pistas que se pueden encontrar. La idea es hacer una ruta de menos de 3 horas, para llegar con tiempo de sobra a casa antes de la comida, que los compromisos familiares no perdonan.
Santuario de nuestra señora de Magallon
Buceando en wikiloc encontramos una ruta que pinta bien gentileza de una tal Dani Mur.  Saliendo de Perdiguera nos lleva primero hacia el noreste, al Santuario de Nuestra Señora de Magallón, un curioso sitio en lo alto de una colina al lado de Leciñena y desde el que salen varias rutas a pie. Además descubrimos que tiene habitaciones, restaurante e incluso sala de celebraciones. 
Pues eso, bajada desde Perdiguera para subir por una pista asfaltada al citado santuario. Desde allí y tras las fotos de rigor, bajamos por una senda trialera de 100 metros escasos hacia las pistas infinitas de esta tierra, para dirigirnos ahora hacia el sur, a atacar a nuestro querido Monte Oscuro una vez más. 
El camino por pista se hace muy ameno, recorriendo los típicos paisajes de monte mediterráneo con romero y pino. Las pistas están perfectas, lo suficientemente húmedas para no levantar polvo y lo suficientemente secas para que no se forme barro. 
Tras subir al Monte Oscuro y empacharnos de paisaje, nos embarcamos en otro de los nuevos alicientes del día; explorar la senda de bajada desde el radar. El excelente track  nos lleva hacia el inicio de la bajada, trialera de nivel medio-alto en su primer tramo, o lo que es lo mismo, a patita por si las moscas. 
La segunda parte, en cambio, es muy espectacular, con tramos fáciles y rápidos, alguna curva cerrada e incluso zonas de sube-baja. Sin embargo, y esto es común en toda la senda, la vegetación se come el camino y en muchos sitios el peligro está a media altura y no en el suelo, por no hablar de muchos troncos caídos que obstaculizan el camino. ¡Qué maravillas harían aquí los de ZonaZero con su tronzadora!. Aún así, la sensación de ir con la bici por el corazón del pinar merece la pena.
La senda nos deja por fin en la pista de siempre, que esta vez cogemos en sentido Perdiguera, a donde llegamos más que satisfechos y pensando en alargar la circular con San Caprasio en el menú.
 

viernes, 11 de noviembre de 2016

VUELTA A PEÑA SOLANA. 1 Nov 2016 Por Marcos.



Tras la noche de las ánimas..., por fin conseguimos coincidir Diego y yo, después de meses en los que no salíamos a andar juntos en bici. 
El objetivo está claro; encontrar una ruta de BTT lo más otoñal posible, de medio día de duración y sin mucho sendero, porque aunque ya no está de moda por estos lares, aún quedamos ciclistas que disfrutamos por las pistas y carriles.
Aconsejados por alguno de los gurús locales, nos decidimos por una ruta en las faldas de la Peña Montañesa, atravesando el precioso bosque mixto de la Valle, en la cara norte de la Peña, haciendo además una circular a otra peña menos conocida; la Peña Solana, al norte de su hermana mayor, separadas ambas por la famosa Collada de Ceresa. Para ello aprovecharemos un tramo de la ruta de ZonaZero "La selva de Irués".
En la Collada
Salimos pues desde Laspuña, subiendo por Socastiello de forma muy progresiva hacia la Valle. La pista, sin ninguna dificultad, te permite apreciar cómo poco a poco el paisaje cambia pasando del bosque mediterráneo de la cara sur, con carrasca y pino, a otro mixto, con robles, encinas y en su cara más umbría hayas, algún arce y árboles de ribera. Ahí teníamos el ansiado bosque otoñal, con alfombra de hojas, humedad y muchos, muchos colores.
La ruta sube siempre de forma progresiva hasta la Collada, a 1550 metros. Allí nos esperan rebaños de vacas y de caballos, que por supuesto ni se inmutan con nuestra presencia, que ya están muy acostumbradas a ver a esos locos pedalistas con casco que proliferan por sus montes como setas. 
Desde este collado se puede bajar hacia Laspuña por la pista (rapidísima pero en la que hay que ir con mucho tiento... y controlar el giro en las herraduras) o por sendero, siguiendo un trozo de otra de las rutas de ZonaZero; la Maxiavalanche v2. Nosotros optamos por poner un poco de picante al descenso y probar el primer tramo de la Maxi, al parecer más fácil que el resto de la bajada. Llegamos a la zona conocida como Los Pozos se sale de nuevo a una pista que te devuelve a la pista principal de bajada a Ceresa. 
Broche perfecto para despedir el otoño, antes de que por fin las lluvias y las nieves rieguen el Pirineo, que falta le hace.

 
  
 

miércoles, 2 de noviembre de 2016

TOUR DE LA PEONERA. Ruta bguara.com (Por Jacobo)

Día de esos entre semana que el personal sanitario disfrutamos con cierta frecuencia como premio a nuestro trabajo en festivos y fines de semana... Asistencia continuada que dicen los jefes...

Me propone Marcos probar una ruta de un centro BTT relativamente nuevo, b-guara cycling rocks-

Proponen diversas rutas divididas entre Rally, Enduro, Familiares, Carretera y una super vuelta al Tozal que ellos mismos denominan Desafio. Todas ellas en versión descargable para GPS y con posibilidad de imprimir un croquis en pdf para portarlo, incluso en diferentes idiomas.
También las gradúan según dificultad técnica y física.

Nosotros nos decidimos por una ruta Rally de unas 4 horas, EL TOUR DE LA PEONERA, circular desde Bierge, teóricamente dura a nivel físico, con unos 850 m de desnivel acumulados en 35km y con un par de puntos que aportaban algo de dificultad técnica. Una bajada por senda delicada y otra por pista bastante compleja, especialmente por la cantidad de piedra suelta.
De los 35km, casi 10 son asfalto, pero se olvidan pronto... aunque la ruta guarda una última subidita por carretera desde la presa hasta el pueblo de Bierge que te deja un regusto final no del todo bueno.

Paisaje impresionante en este otoño light que estamos viviendo. Desde los barrancos del Alcanadre hasta el macizo del perdido de fondo, acompañados por inmensas colonias de buitres que... afortunadamente... sabemos que no atacan...

Punto de agua intermedio en la Almunias de Rodellar

La descripción de la ruta es exacta en la página, también en cuanto al aspecto de dureza técnica y física.

Para nuestro gusto, muy muy recomendable la web, a falta de probar nuevas rutas.



punto de inicio de la senda de descenso mas técnica

Algún paso... exige desmontarse

Otras zonas son perfectamente ciclables

Impresionantes paisajes

Desde los escarpes del río Alacanadre (Barranco de la peonera) hasta el macizo del perdido


CURSO DE INICIACIÓN AL ENDURO DE ZONA-ZERO (24 Y 25 SEPTIEMBRE): (Por Marcos)



Siempre he intentado ser bastante autodidacta, para qué negarlo, y esto del enduro tampoco fue una excepción. Y así me luce el pelo. 
Después de varias caídas y de no saber ni hacia qué lado mover el culo cuando tengo que superar un escalón o una curva cerrada, decidí que por una vez me apuntaría a algún curso que me diera las nociones básicas para sufrir menos en las salidas. 
Así que, aconsejado por Martín, me inscribí a los cursos de formación que este año ofrecía Zona Zero, que además de estar bastante ajustados de precio, te ofrecen la posibilidad de realizar los 4 fines de semana de los que consta el curso completo o algún fin de semana suelto. 
Desde que llegué el sábado al punto de encuentro comprobé el éxito de esta iniciativa; grupos de perfeccionamiento, de iniciación de adultos, de chavales y chavalas de apenas 12 años, de chicas, etc. Todo el párking lleno a rebosar y los padres de Zona Zero (Ángel, Rafa) organizando el cotarro.
Mi grupo incluía gente desde 16 a los 50 años, con niveles muy similares. En seguida comprobé que el éxito no se debía sólo a los participantes locales; había gente de Pamplona, Huesca, Zaragoza y País Vasco.De monitor nos asignaron a Edu Matamoros, un madrileño afincado desde hace años en el valle de Benasque y que entre otras cosas se dedica a desarrollar BTT Puro Pirineo (http://www.bttpuropirineo.com/), uno de los nuevos centros de bici de montaña vecinos a Zona Zero, que  junto al de  la Sierra de Guara (http://bguara.com/) o el del Valle de Tena (http://www.bttpirineosaltogallego.com/) han convertido a la provincia de Huesca en un paraíso para pedalear. 
En seguida conectamos todos con él, por su claridad y sencillez al explicarnos las diferentes técnicas, pero sobre todo porque  transmitía una pasión por la bici y por la montaña que era imposible que no se te contagiara, huyendo además de esnobismos respecto al material o la terminología del enduro, rally o DH... . Para él la bici siempre ha sido lo mismo: "esto se trata de subir y luego bajar, si se puede montado y si no a pie... ¡como ha sido toda la vida!". Luego que cada uno le ponga las etiquetas y se compre las máquinas que quiera. 
El resultado fue un gran fin de semana por el entorno de Aínsa, practicando, aprendiendo y rodando por las margas de los Badlands o las trochas de Guaso . Risas no faltaron, sudores tampoco, y todo ello con un grupo en el que el único objetivo era ser un poquito menos torpes que hasta ahora y disfrutar de la bici. ¡Un placer, chavales!.